NO HACEN POLÍTICA... JUEGAN AL FÚTBOL
La política argentina, me dijo un analista colombiano, se ha vuelto una mariconada. Le perdoné el exabrupto, inadvertidamente discriminatorio, y le pedí que me explicara a qué se refería. Entonces, me retrucó: «No hacen política. Se dedican al fútbol». Según el colombiano, el mayor logro de Macri ha sido convertir los asuntos graves en meras contiendas tácticas en el campo de juego, y en chicanas mediáticas para ablandar a sus competidores. Marcos Peña y Durán Barba son la expresión más acabada de esta representación reduccionista de la política. En este marco, excepto unos pocos medios y contados periodistas, la mayoría ha abandonado la seriedad que merece la política a cambio de la sorna, la mala educación, o el talante futbolero cool para comentar los destinos de la patria. Alguien podría pensar que la Argentina tiene una larga tradición en este rubro de espectáculos. Tato Bores sería un emblema de ese linaje satírico. El problema es que en nuestra época nadie ve estos pr...