EL ALMA DE LOS ARGENTINOS
En alguna ocasión, el Jefe de Gabinete, Marcos Peña, sostuvo que el objetivo de su gobierno era "el alma de los argentinos". La expresión suscitó críticas y adhesiones. Los propios contrapusieron a la "obsesión" por la heladera, las convicciones. Los ajenos intuyeron lo que ese alegado ponía al descubierto de la política oficialista. Desde aquel momento hasta la fecha "han pasado no pocas cosas" en Argentina. El descenso a los confines de las estadísticas mundiales posiciona al gobierno de Macri como el peor de la reciente democracia argentina. No solo por la situación que suscitó en términos absolutos, sino por su significación en términos relativos: en función de la herencia recibida. Hemos dejado atrás las referencias a la "pesada herencia", para recuperar críticamente la llamada "década ganada", para sopesar claros y oscuros, redefinir direcciones y corregir faltas. Por otro lado, empezamos a tomar consciencia de que el