ÉTICA DE LA DISCUSIÓN
Hoy quiero pensar sobre lo que significa discutir con alguien. Creo que es un tema importante. Para empezar, quiero defender algo que mis amigos pueden corroborar. Mis relaciones con la gente no están fundadas de manera exclusiva en la afinidad ideológica que puedo tener con ellos. Tengo amigos que pertenecen a los más variados grupos humanos, que se adhieren a las más variadas ideologías, que sostienen una variedad indecible de posiciones. Eso no significa que me adhiera a la injustificada creencia de que todo el mundo tiene “derecho” a decir lo que quiera impunemente. Por el contrario, creo que al hacer público nuestro pensamiento estamos, de un modo u otro, invitando a nuestros interlocutores a poner a prueba nuestras afirmaciones. De este modo, la discusión se convierte en una buena ocasión para cotejar nuestros pensamientos con los de nuestros adversarios circunstanciales con el fin de asegurarnos, en primer lugar, de no estar diciendo una burrada, o adoptando un posicionamiento s...